No hablamos de ciencia ficción.
Esta es la primero que se viene a la cabeza de muchos padres y tutores cuando un hijo o un alumno se acerca y menciona que le gustaría aprender a hacer películas, series de televisión o cualquier tipo de contenido audiovisual que día a día vemos en cualquier pantalla, ya sea móvil, tablet, ordenador…
Es una paradoja. Consumimos contenidos audiovisuales de forma masiva y generalizada, sin excepción, y sin embargo muchas personas no ven como una opción profesional de futuro la creación de esos contenidos. A lo sumo se plantean la posibilidad de estudiar comunicación audiovisual en la universidad.
Sería largo y aburrido detallar y explicar la cantidad de personas cualificadas que trabajan en una producción cinematográfica, en una serie de televisión. Sólo vemos las caras de los actores pero, te has preguntado ¿cuántas personas intervienen y están detrás de las cámaras?.
Sólo unos datos: Exodus de Ridley Scott rodada en España casi íntegramente el pasado año utilizó 1.000 personas entre los departamentos de producción, cámara, arte, vestuario, maquillaje… además de otros 500 extras en muchas escenas. Sólo en Canarias de alquilaron íntegros 5 resorts vacacionales para alojar a los trabajadores (casi todos españoles) durante varios meses. El desembolso total entre sueldos, manutención, decorados, etc, rondó los 80 millones de euros.
Ya sabemos que no todas las producciones son de este tamaño, pero ¿ somos conscientes de la cantidad de personas que intervienen en una producción ? ¿ que se necesitan ? ¿ Cuántas series están actualmente produciendo y emitiendo entre TVE, Antena 3, Telecinco…? ¿ Y otro tipo de programas en la Sexta, Cuatro… ?
Confiamos que algún día, estudiar cine o televisión, no sea algo que produzca perplejidad ni pánico sino, como en muchos países más avanzados que nosotros ( Usa, Alemania, Inglaterra, Francia, China…), sea algo natural y una opción más.
